Educar en las aulas y en la vida fue el objetivo prioritario de la
AGRUPACIÓN FEMENINA ESCUELAS RAGGIO.
AFER sigue siendo hasta el día de hoy un buen ejemplo de cómo se
valió el sistema educativo para formar jóvenes.
Con valores y principios basados en el respeto hacia el entorno.
Su primera misión era el ser humano en conjunto con su ambiente.
La premisa era actuar coordinadamente y la conformación de grupos
de trabajo permitía que esto fuese posible. Trabajo en equipo, colaboración,
comprensión y compañerismo era fundamental para la convivencia.
Un grupo que en las diferencias individuales encontraba la unión.
El aceptar la opinión disidente era el fundamento para la interacción entre
todas las integrantes.
Sumado al espíritu de aventura que se requería hacían la combinación
perfecta para lograr el ideal de campamento, hacernos crecer.
Fomentó la superación individual y colectiva para crecer como
agrupación y lograr la sana independencia adolescente.